viernes, 2 de diciembre de 2011

El paseo del cerdo


Una mañana cualquiera, sentada al ordenador junto a la ventana, miro hacia la calle por un momento atraída por la hermosa luz que ilumina el exterior. Estamos a finales de noviembre, pero el día es espléndido y soleado. De repente veo pasar con paso decidido un cerdo negro, grande y lustroso, una hembra de cerdo negro. Pienso que he visto visiones  pero, aún así, salgo rápidamente a la calle en batín y zapatillas (la curiosidad es más fuerte que la coquetería) para asegurarme de que no estoy soñando. Y ahí está  el cerdo, en medio de la vía pública, en su paseo matinal. Varios vecinos se han asomado también y siguen al cerdo con la mirada. Nadie lo persigue y el cerdo continua tan tranquilo. Yo voy tras él y lo llamo:"tita...tita", la verdad es que no tengo ni idea de como se llama a los cerdos, pero mi intención es captar su atención para que se suba a la acera y no lo arrolle un coche. En esos momentos no hay mucho tráfico y los coches que pasan se paran cuando lo ven y después lo esquivan.

Como el cerdo no me hace ni caso y ya ha alcanzado el final de la calle con su paso ligero, corro al teléfono para llamar al ayuntamiento, a ver si las fuerzas de orden público consiguen reducir al animal. En el ayuntamiento me dicen que están avisados y que envían un agente.
Después de la llamada salgo de nuevo a la calle, no queda rastro del cerdo ni veo llegar a las autoridades, por lo que vuelvo a mi ordenador, pensando que he perdido la ocasión de fotografiar al gorrino fugitivo...Minutos después se oye una sirena y el cerdo vuelve a pasar ante mi ventana, esta vez en dirección opuesta. El propietario ha sido localizado y lo persigue en bicicleta, el coche patrulla lo sigue también.
El cerdo va calle arriba y calle abajo. Ahora ya llevo la cámara y consigo fotografiarlo.
Pregunto, ¿por qué no lo agarran del cuello y lo sujetan? Me dicen que está nervioso y puede morder. Varios vecinos se han unido a la cacería pero todos se limitan a cerrarle el paso. En un momento dado el animal se ve acorralado y entonces gira hacia el callejón que baja a los campos. Le vemos descender por él, el propietario le va detrás. Todos nos quedamos ya más tranquilos. Se terminó la aventura.

2 comentarios:

  1. Eii!!! m'hagués agradat veure't corre darrera es porc!! aquesta és la Mallorca nostra!! i per molts anys!!

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  2. Bon vespre Aina, no saps quin recorregut mes llarg va fer el porc...tot una qualqu ho va pujar al facebook i ho va fer famós la mateixa matinada. :-)
    una abraçada, wapa

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